Y bien, llegaron los datos de ventas de música en España en la primera mitad del año 2013 y como no podía ser de otra manera, son desesperanzadores para la industria. En efecto, Promusicae habla de una caída de un 12% con respecto al primer semestre del año pasado (€55,9M en 2013 vs €63,7M en 2013). Pero dentro de este descenso no se comportan igual todos las fuentes de ingresos, veamos:
1.- Descenso del 23,3% en formatos físicos. ¿A alguien le extraña?, y es más, mi pregunta es la siguiente ¿y dónde quieren que los compremos? Porque estuve el otro día en el nuevo Media Markt de Castellana y el espacio dedicado a la música era ridículo, y por supuesto la oferta era standard en términos de diversidad y en general, cara. Y otra pregunta, ¿está incluido en ese informe Amazon.es, con sede en Luxemburgo y cuyos productos no vienen necesariamente de España? Porque viendo los patrones de consumo de compradores de música que casi llamaría «compulsivos» (entre los que me incluyo), podría decir sin temor a equivocarme que Amazon España es con diferencia el mayor vendedor de música en formato físico en España.
2.- Subida de «sólo» el 5,3% de productos digitales. Y la verdad es que ahí de nuevo hay que distinguir el grano de la paja, porque caen enormemente los productos de móvil (tonos, ringbacktonos…), y que lo que me resulta extraño es que todavía facturen casi €1M con ese penoso subproducto, que supongo y espero que tenderá a cero en próximos semestres; y por otro lado están los ingresos por streaming, de los que hablábamos hace un par de días y que lo hacen en un 18%, mientras que las descargas caen, supongo que precisamente canibalizadas en cierta forma por esos streamings. Y aquí de nuevo vemos que los consumidores prefieren la música como servicio que como producto, como ya he repetido últimamente.
A mí de todas formas me gustaría comparar esa caída del 12% con otro tipo de productos y servicios o de industrias y veríamos que esta puede ser una media habitual en determinados productos o servicios que no son de primera necesidad, en un país que entra ya en su 5º ó 6º año de una crisis económica de grandes proporciones y donde, seamos sinceros, estos no son artículos de primera necesidad.
Así pues, luces y sombras en este informe que en mi caso me parece bastante elocuente de cuáles son los hábitos de consumo de música de los españoles, y dónde deberían focalizarse los diferentes actores de la industria.
Pingback: Nadie compra discos - El Futuro Perfecto